K.O TÉCNICO

CON GANAS DE REVANCHA, curtiéndome, aprendiendo, valorando, asimilando... cualquier calificativo de esta índole se le puede poner al día de hoy después de mi primer abandono en una prueba. Estoy moralmente mejor de lo esperado, gran parte de ello la tenéis vosotros por vuestro aliento y ánimos desde las distintas redes sociales, por mi familia y sobre todo por mí mismo, porque  creo que hice bien en hacer lo que hice. 

Hoy todo tiene un color grisáceo pero en pocos días saldrá el Sol para seguir soñando. Peor lo tiene nuestro Real Zaragoza, ese sí que está en la U.C.I.

No pensaba hacer una crónica de la carrera, pero por otro lado como Yo siempre digo  “todo suma”, y no es para estar orgulloso de lo realizado pero tampoco para estar derrotado, y como mi relación con vosotros mi pequeña gran familia de corredores es como un matrimonio “en lo bueno y en lo malo”, os voy a contar lo sucedido.

Primeramente agradecer la presencia en línea de salida y momentos antes de, de los amigos Javier Ortega, Alfonso Cistué y Enrique Paz, gracias por vuestra compañía y ánimos (vaya dos Cracks). Por otro lado a mi TEAM, que sin saber lo que la noche me iba a deparar yo si sabía que el estaría ahí, siempre lo está. A mi compañero Antonio “el torito”, pendiente de mi en todo momento y a todos mis compañeros de fatigas por el apoyo recibido en momentos puntuales de carrera, Un abrazo a mi pequeña Gran Familia.

El amigo Vicente ¡Que Crack!

La noche no comenzó bien, el Zaragoza perdía y tocábamos fondo, pero aun a pesar de todo con alegría arropado por mis hijos y mi mujer compartimos momentos previos a la salida con Alfonso, Miguelo y Alfonso Cistue tomándonos un café en las inmediaciones de la plaza del pilar. Poco antes la salida de los andarines, donde quise estar para animar y apoyar al amigo Vicente en su reto particular, la noche era fría, tanto en temperatura como en ambiente, si algo me decía que esta iba a ser una carrera donde por delante iba a ver más que palabras.

Fotos de rigor, saludos y dedicatoria a los míos y tras una desangelada estampa de la plaza del Pilar (esta prueba no está hecha para corredores por mucho que se empeñen) salimos, unos 45 runners dispuestos a llegar a Huesca con 75km en las piernas.

Primeros km por nuestra ciudad un poco caóticos, semáforos, cruces, etc y el ritmo de los de adelante a fuego desde el principio, hicieron que al salir de Zaragoza el pelotón ya fuera un reguero con varias grupetos de por medio. Yo no iba fino (por mi tobillo) pero me encontraba bien e intentaba aparcar en mis pensamientos mis primeros pequeños dolores. Bien acompañado en todo momento por Ricardo, David Velilla, Marcos, Luis, Miguelo, Antonio...y alguno más que me abre dejado hicimos los primeros 15km a ritmo trotón por debajo de 6´, lo planeado.

Llegamos a la primera parada San Juan, allí un par de bizcochos y reponer líquidos, foto y a seguir, sin querer parar mucho decidimos tirar para adelante del grupo sabiendo que en un par de km nos alcanzarían el resto. La noche es fría y una mínima parada hace que uno se quede frío, por lo menos en mi caso, tomare nota para la siguiente chaqueta a la mochila, aunque ya sabemos que con el sudor ya en las capas de debajo poco se puede hacer.

Llegamos a un tramo de tierra con muchos toboganes grandes rodaduras  en la pista por los tractores y las aguas de estos días, a su vez y por debajo en la carretera empezamos a ver a los primero andarines del día. Mi tobillo empieza a revelarse y el piso más inestable hace que me moleste aun mas, no pasa nada seguimos para adelante. Ando ya tocado y voy frenando a mi team y Antonio, empiezo a agobiarme un poco con el ritmo que llevamos, no voy cómodo y todo me parece mal, les digo que marchen, que yo ya iré a mi paso. Antonio decide tirar un poco para adelante y Miguelo se queda a mi lado, hipotecando tal vez su tiempo de llegada. Decidimos poco antes de divisar la rotonda de la entrada en Zuera el tirarnos por abajo hacia la carretera, igual ayuda a mi tobillo el volver a pisar liso, y total casi todos van por allí. Avivamos ritmo y no vamos muy por debajo de lo planeado al principio, pero si empiezo a darme cuenta de que Miguel va mucho mejor que Yo y tengo que intentar convencerle de que tire para adelante.

Llegamos a Zuera, donde aprovecho para ir al baño y aliviar así mi sensación de agobio de estomago, mientras todos reponen fuerzas, allí están otra vez Antonio, Ricardo, Velilla y compañía. Todos me preguntan, me conocen y saben que no estoy bien, pero seguimos, como un poco (una galleta y un plátano) repongo líquidos y a seguir. Me he quedado helado pienso al salir (debería haberme cambiado de camiseta interior, pensé, pero la noche es larga y más adelante me hará falta seguro)). Grave error, aunque no creo que determinante porque me hubiera pasado igual, pero desde entonces km30 y hasta mi final km 35-36, mi cuerpo no paro de tiritar y de sentir escalofríos y malas ganas con incluso ganas de vomitar. Primeros 2 km después de Zuera y decido ponerme serio para que Miguelo y Antonio marchen para adelante, Miguelo se hace derogar pero al final me cabreo y lo echo, si sigo así se que no voy a terminar, me tengo que parar una y otra vez y mis tripas empiezan a no dejarme ni mover. Es duro dejar a un amigo pero nada mas podías hacer Miguel, otras veces, me ha pasado a mí al revés y lo he tenido que hacer, tranquilo Team en la TMT llegaremos juntos a ser Finisher.

A partir de ahí comenzó mi corto calvario de 5km hasta el siguiente puesto de avituallamiento, digo corto, pero se me hizo eterno por mi estado y sobre todo por el frío. Ya son muchas las veces que he pensado en comprarme una buena chaqueta ligera para ocasiones como estas, pero por A o por B aun no lo he hecho, habrá que apuntarla de cara a un cumpleaños. Andando, aunque a buen ritmo y con los brazos en cruz haciendo de abrigo a mi barriga logro hacer los primeros km en soledad adelantando a andarines y todo, pruebo a trotar de nuevo pero veo que mi carrera termina, suena mi móvil ¡¡Miguelo!!, ¿qué tal vas?¿donde estas? Apenas nos separan un km y me parece una eternidad, tranquilo me dice al llegar te tomas un caldo y tiras para adelante, intento darle ánimos yo a él y que no se preocupe que estoy bien. Llego al avituallamiento 35,370 km y pregunto la posibilidad de abandonar allí, me debieron ver mala cara porque me animaron hacerlo, me invitaron a entrar a la furgoneta y allí estar más resguardado del frío y así esperar al último andarín para montar en el coche escoba y llegar a la Cárcel donde espera un autobús para trasladarnos a Almudevar. ¿Cuánto puede tardar? Pregunto, 2 horas o así, uffff , ahí me desplome, pregunte cuantos km había a la cárcel por ir andando hasta allí y así adelantar un poco la espera y poder tumbarme en el bus. La distancia era pues similar en tiempo, tanto en espera allí como andando y como lo iba a pasar mal con el frío sobre todo decidí abortar y quedarme allí ya. Un caldito caliente que apenas me pude tomar y a esperar. Llegaron más retirados en el coche escoba una hora después, calculo yo y desde allí al autobús de la cárcel, donde ya cambiado de ropa y tumbado relajado empecé poco a poco a desconectar de la prueba. 

Ahora comenzaba mi segunda carrera, la de poder llegar a Huesca a tiempo a la línea de llegada para ver a mis compis. El autobús saldría una vez llegado a ese punto el ultimo andarín y con el cartel de completo salíamos a Almudevar. En él, llamada a Miguelo, todo va bien me dijo ¡¡Bien!! No llego me decía una y otra vez, y pensando una luz ilumino mi camino, ¡¡Beatriz!! Viene a buscar a Alfonso, va lo llamo y me la juego. Llame Alfonso y luego contacte con Bea a la que bombardee a llamadas y wasap durante su viaje ¡¡GRACIAS BEA!!.

Una vez en Almudevar, saludo desde el autobús al amigo Vicente que sigue su andadura hasta Huesca (Va muy bien), mientras todos almuerzan, yo me doy vuelta y vuelta alrededor del fuego, por fin, entro en calor y aun teniendo a deseo la trenza y la panceta, no pruebo ni bocado. Con el Sol ya radiante, me dan ganas hasta de arrancar a caminar hasta Huesca, pero la conciencia me dice que no y definitivamente digo basta y cambio el chip.

Llega Bea (gracias otra vez) y Alfonso ya me ha llamado para ver por dónde vamos ¡¡Que fiera 7:51!!, llegada al polideportivo  y saludos a todos los llegados, ¡¡Que campeones!! Patxi, Ricardo, Velilla... Llamo a Miguel junto a su Padre (Buena gente, de tal palo tal astilla) para ver cuánto le queda, no quiero perderme su llegada a meta por estar en la ducha, le queda media hora larga, así que a duchar rápido y para afuera. Salimos y Bea y Alfonso se van a desayunar ¡se lo han ganado! Y llega Antonio, que Cracks, 9 horitas y poco después mi TEAM 9:40, cuanto me alegro, poder ver llegar al que está a tu lado es como saborear una victoria propia, como aun no habiendo logrado uno su reto, saber que ha merecido la pena, esos entrenos juntos, esos madrugones....FELICIDADES EN ESPECIAL A TI TEAM.

Aquí termina todo, con una derrota en mi reto pero una victoria de mi equipo. Felicitar a todos los finisher, Daniel, Alfonso, Luis, Jesús, Vicente, Marcos, Patxi, David V, Ricardo, Antonio, Joey, Miguelo ...y todos los demás que no he nombrado.  Ahora toca pensar en recuperar y muy pronto la haré entrenando por mi cuenta para quitarme la espinita clavada, ya que, si no cambia mucho la cosa, no creo que la repita, tal vez como andada pero desde luego corriendo No, creo que la prueba está organizada para lo que es y no para correr...

Como siempre un abrazo a todos, felicidades y gracias. David.dsg

Km día: 35 km
Km año: 1389 km

Competiciones/retos: TBCI(78km), Maratón de Barcelona, Jorgeada(35km).