ZANCADAS DE ILUSIÓN

¡¡A TODO NO SE LLEGA!!, el destino me jugo una baza el pasado día 23, festividad de San Jorge en Aragón y a su vez, día marcado doblemente en nuestro calendario.
Primeramente la cita era acudir el grueso del grupo con "Topete" y los Bomberos de Zaragoza para apoyar  este día con nuestra presencia a su gran proyecto solidario Zancadas de Ilusión.
 
 
Individualmente muchos de nosotros hemos colaborado con ellos en la adquisición de sus productos publicitarios, pero nosotros queríamos correr con ellos y ayudarles en un tramo de ese gran camino por tan buena causa. Pero como os decía, a mi, el destino me jugo una baza y fui agraciado en un sorteo junto con mi amigo Jesús.V para realizar la Jorgeada. Así pues, esta claro que en todos los sitios no se puede estar, pero parte de nuestro grupo Los Corredores del Ebro si lo hicieron y nos representaron al resto en lo que ellos resumen como una experiencia inolvidable, sin mas pues os dejo la crónica del evento del amigo y compañero de grupo Javier pero antes mostrar mi admiración por esta gente y estos valores humanos, seguramente con mucha gente como esta, el mundo seria distinto.
Gracias por compartir con nosotros estos momentos.
                                                                                  David.dsg


G R A N D E !!!.Así, es como podría denominar el día de San Jorge de este año. Grande por la experiencia vivida, grande por la compañía, grande por la respuesta ciudadana y sobre todo grande por el motivo por el cual os escribo.
Zancadas de Ilusión realizaba su tercera etapa, Ontinar-Fuendetodos, unos 75kms duros de sol y estepa, y ahí es donde  Fernando, Alfonso C , Alfonso M., Carlos G, y servidor decidimos aportar nuestra granito de arena al proyecto con nuestra presencia en dicha etapa del reto solidario.
 

Nos unimos a la caravana de corredores y ciclistas a la altura de Villanueva sobre las 9:30. Topete a la cabeza, nos dirigimos al centro Aspace entre caminos pedregosos y un sol amenazante. Buen ambiente y conocidos de este mundillo hacen que los km sean entretenidos. Bombos, cantos, aplausos y sobre todo sonrisas,  dan la bienvenida a Topete al centro Aspace. Se respira ilusión, ganas de disfrutar de la vida, solidaridad y muchas más cosas que soy incapaz de describir ya que ese momento, como en el resto del día me siento desbordado y sobrepasado. Bailes, abrazos, besos y alguna lágrima dan la salida hacía Zaragoza. Seguimos por caminos sin más, hasta la entrada de la ciudad y ahí, la Policía nos abre paso por todas las calles. Gritos de ánimo de los viandantes, gritos de "Topete, vamos" y entre aplausos llegamos al parque de bomberos y después la plaza del Pilar, pasando por el Puente de Piedra.
Zancadas es el centro de atención, los scouts aportan su presencia y al entrar a la plaza del Pilar nos volvemos pequeños, Topete pide que no le dejemos solo, que le arropemos. Las emociones se desatan y te das cuenta, una vez más, de la magnitud del reto.
        La caravana se hace más grande, subimos por C/Alfonso, corredores, ciclistas, y al frente niños en silla de ruedas de Aspace, con sus monitores empujándolas ¡¡Que fuerza de voluntad!!, Paseo de Independencia nos abre camino con cara de sorpresa y atención ante la marea verde, aplausos y gritos de ánimo nos acompañan hasta la salida de  Torrero. Exaustos, los animadores que han empujado las sillas nos despiden a la altura del canal, hacemos una breve parada, y las personas de la calle se acercan, preguntan y siento que uno de los motivos del reto se ha cumplido al paso por nuestra ciudad.
 

        En torrero, pasado el cementerio, se disgrega el grupo. Avituallamiento, un poquito de respiro y a continuar dirección las planas. Topete, respira, ha dejado la ciudad y el asfalto y se siente más liberado, relajado. Compartimos momentos muy buenos de experiencias deportivas y sobre todo del reto solidario, quedamos unos 8 corredores bajo un sol de justicia, tierra blanca y matorral bajo a nuestro lado, (mala compañía es esa). Carlos, va animando el grupo con sus comentarios ,creo que tanto él como Víctor (los dos bomberos) son partes muy importantes del logro del reto, y así hay que reconocérselo. Sólo puedo dar las gracias, a estos GRANDES, por haberme dejado compartir su compañía estos km, su experiencia y reflexiones.
 

        Decirles que siempre tendrán la aportación de los Corredores del Ebro, sin duda alguna, cuando sea necesario. Y cuando no lo sea, también.  NOS VEMOS EN LOS CAMINOS.
 
                                                                                                                           Javier Ortega
 

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